4 cosas que no te puedes perder durante tu visita a Villena
Castillo de la Atalaya
Sin lugar a dudas, Villena se identifica claramente con su Castillo de la Atalaya, cuyo erguido perfil recortado en el horizonte recuerda el mestizaje cultural musulmán y cristiano. Es sin duda el monumento más significativo de Villena y su elemento identificativo junto al Tesoro. Su gran singularidad y valor histórico lo llevaron a ser declarado “Monumento Histórico Artístico” en 1931 y, actualmente, goza de mayor protección al estar declarado Bien de Interés Cultural.
El origen del Castillo de la Atalaya se remonta a finales del siglo XII. Su emplazamiento en el cerro de San Cristóbal, una moderada elevación de la Sierra de la Villa, le permitió ejercer el control y la defensa del territorio circundante. Su uso se prolonga en el tiempo desde época musulmana hasta la Edad Contemporánea, viviendo acontecimientos diversos desde la ocupación musulmana de estas tierras hasta la Guerra de la Independencia.
Horarios
– Mañanas: Martes a domingo, festivos y lunes víspera de festivos. Visitas guiadas a las 11, 12 y 13h.
– Tardes: Martes a sábados. Visitas guiadas a las 16:00 y 17:00.
– Precio: 3 €
Casas – cueva Tuareg
Ubicadas a las faldas del Castillo de la Atalaya de Villena, una parte de las antiguas casas cueva del centro histórico han sido recuperadas por los componentes de la asociación Tuareg, perteneciente a los Moros y Cristianos de Villena, para convertirse en la primera cueva visitable de la población.
Tras tres meses de trabajos, se acondicionaron para la visita unas estancias que se encontraban ocultas y que antaño fueron habitadas por pobladores locales. De hecho, era muy habitual en Villena durante los siglos XIX y XX, la construcción de casas-cueva en la parte alta del centro histórico. Estas eran levantadas por ciudadanos humildes, adosando las viviendas a la propia roca de la Sierra de la Villa y excavando la piedra calcárea de la misma para dar forma a estancias que se usaban para fines diversos: habitaciones, despensas,etc.
En las Casas-Cueva Tuareg existen distintas dependencias, todas ellas decoradas con elementos del mundo árabe, como antiguos telares, escudos, fotografías, inscripciones, cuadros, utensilios… con el fin de trasladar al visitante a otra época, y desconectar del mundo exterior, en un espacio sin ruidos, donde la protagonista es la roca de la montaña que sustenta al castillo de Villena.
Electro harinera
Este enorme edificio, situado junto al Teatro Chapí, es una de las principales joyas del patrimonio industrial de Villena. Actualmente, está siendo transformado para convertirlo en el futuro Museo de la Ciudad.
En mayo de 1895 se crea la Electra Villenense, empresa privada autorizada para abastecer de electricidad a Villena y sustituir los antiguos faroles de petróleo. Durante los primeros años, sin embargo, tendría problemas de buen funcionamiento, existiendo incluso un episodio en que Villena quedó sin luz durante once días.
En 1905, sería adquirida por la Sociedad Andrieux, Ratié y Cía, de origen francés; los cuales mejoraron el servicio de alumbrado de particulares, ampliando las horas de suministro. Años después, en 1927, se convierte en Electro Harinera Villenense, pues también se dedicarían a la fábrica y venta de harina, que se vendía en el mismo edificio. Ya en 1942, también producen y venden hielo. En 1957, las mismas cámaras frigoríficas se utilizan como almacén de fruta para los agricultores de Villena, que hasta entonces no disponían de neveras eléctricas.
Teatro Chapí
El origen del actual Teatro Chapí hay que buscarlo en el año 1885, año en el que se erige un primer teatro-circo con este nombre en Villena. Su creación surge de la idea de unos villenenses que se desplazan a Alicante para asistir al estreno de “La Tempestad”, zarzuela cuyo autor es su paisano Ruperto Chapí Lorente.
En 1908 su mal estado obliga su derribo. A partir de aquí, surge la idea de la construcción de un nuevo coliseo que, tras varios años de obras, fue inaugurado el 5 de Diciembre de 1925 con las romanzas de “La Tempestad”. Fiel reflejo de la prolongación de esta construcción será la diversidad de estilos arquitectónicos que el visitante puede percibir.
Así las dos fachadas laterales y la zona de la caja del escenario guardan todavía el sabor del primitivo proyecto de José María Manuel Cortina, famoso arquitecto valenciano adscrito al modernismo historicista de vertientes neoárabes. Sin embargo la falta de fondos para levantar el ambicioso proyecto de Cortina hizo que este último abandonara las obras y estas se detuvieran en 1919.
Tras este parón, se decide ceder los espacios laterales y superiores de la zona delantera de la edificación al Casino del Círculo Agrícola Mercantil, lo cual soluciona la falta de recursos indispensables para proseguir y terminar las obras, siendo estas continuadas por los también arquitectos valencianos Garín Hermanos.
Tu hotel para tu estancia en Villena
¿Te ha gustado nuestra presentación sobre las 4 cosas que no te puedes perder en tu visita a Villena? Ahora que ya has elegido tu plan ideal y adaptado a tus gustos, sólo te queda encontrar el hotel que haga de tu escapada una experiencia única. Nosotros te recomendamos Hotel Salvadora, un hotel en Villena que te enamorará. ¡Ven y conócenos! ¡Esperamos tu visita con los brazos abiertos.
¡Reserva ya tu habitación en Hotel Salvadora ¡
